La accesibilidad en espacios de alto tráfico puede ser un desafío. La premisa de toda puerta y su sistema de cierre es garantizar la seguridad del lugar donde es instalado, pero esta misión puede verse comprometida si, constantemente, están entrando y saliendo personas. Es una situación habitual en edificios de oficinas y comunidades de vecinos. Las cerraduras activadas por códigos numéricos se han hecho populares al ofrecer una alternativa cómoda y eficaz a este problema.
La solución es, que a cada usuario con permiso de entrada se le suministra un identificador único con el que puede encender el sistema, mejorando la accesibilidad de tú edificio, oficina o el espacio en donde lo desees instalar.
¿Cómo funciona este sistema de apertura?
Es muy sencillo en realidad, una vez que el sistema de control acepta un código, envía una señal eléctrica que acciona el mecanismo de apertura , liberando las piezas mecánicas que conforma el cierre. El usuario sólo tendrá que esperar el tiempo de retardo de apertura y podrá empujar la puerta.